viernes, 25 de mayo de 2012

vosotras...


A veces me imagino que no estáis,

y un agujero cada vez más grande, se abre dentro de mi…

y en ese hueco también está el recuerdo… de cuando estaba sólo...

de una época en la que estar conmigo mismo estaba bien…

siempre que fuera un rato…


pero como el ahora impera y el ahora es lo que somos...

si imagino que no estáis y vuelvo a pensar en mí, me veo sólo...

sin la risa que 100 veces al día ahoga mi rutina,

con los brazos rotos de dolor por no poder abrazaros,

sin la persecución de vuestra mirada… 

sólo en el sentido más doloroso de la palabra…

que entiende tan bien el que lo ha estado…
y que seguro sufrirá el que lo estará…

Pero cierro los ojos con fuerza y al volver a abrirlos se me inunda el cuerpo con los sentidos… os veo, os puedo tocar, puedo imaginar una cosa y hacerla al instante, hacer que os riáis…

Y así pasan los días, como decía aquella canción,
y nosotros dejamos de lado la desesperación, para cambiarla por un certero, simple y rutinario hola, que al tomarlo cada día combinado con un poco de sinceridad, dos hielos de paciencia y un toque de humor, hace que el paso de los días tenga sentido y no perdamos el tiempo, porque siempre que me preguntes que cuando, como y donde, yo siempre te responderé: nosotros, como sea y donde sea.